Las graveras poco pescadas suelen albergar peces desconfiados. Probamos esta jornada poco engodo pero negro para que no marque mucho el fondo y no despierte el recelo de los peces y mucho gusano que es uno de los cebos más eficaces. Lo echamos con la coupelle para concentrar al máximo los peces.
Empezaron a picar a los 20 minutos pero una vez llegados al puesto fueron saliendo de manera regular.
Pablo se puso a pescar un rato y sacó este precioso carpín colorado. Estos peces de acuario llegan a tener unos tamaños considerables cuando viven en ambientes naturales.
El resultado de la pesca fueron estos carpines de variados colores.
Algunos como este con aleta en forma de velo.
Allí los dejamos a todos a espera de hacerles otra visita, esta vez con la cámara de video.
Hermosos ejemplares los que sacaron :)
ResponderEliminarlo que mas me a gustado es que todos volvieron al agua XD :D